El enigma de su desaparición ya lleva un año.
Las sospechas de quiénes lo "desaparecieron" también.
Las investigaciones, que dan vueltas y no consiguen nada, y que permitieron que los días pasaran y pasaran, y en estos casos el tiempo "juega en contra".
Las marchas se han sucedido, los reclamos a las autoridades.
Una amarga paradoja se inscribe en este año sin JULIO LÓPEZ: desapareció en democracia, las fuerzas perversas siguen rondando, están sueltas, pegan el zarpazo en la oscuridad, se toman represalias cuando la verdad está próxima.
A pesar de todo los testimonios no cesaron, los juicios siguen, los testigos se animaron, lo hicieron por JULIO.