Sostiene Pereira, relato transcurre que en Portugal hacia 1938. Este país hacia 1910 había proclamado la República y pasó por una sucesión de hechos encaminados a terminar con esa forma de gobierno. Cuando llega al gobierno Antonio de Oliveira Salazar, recibe poderes extraordinarios, queda primero a cargo de las finanzas portuguesas, luego será primer ministro. Se iniciaba el "salazarismo".
En poco tiempo Salazar se convirtió en la figura política más importante de Portugal. Profundamente religioso, restableció gran parte del poder de la Iglesia. En 1930 fundó la União Nacional (Unión Nacional), una organización política basada en principios autoritarios. Pasó a ser primer ministro y dictador en 1932. Al año siguiente promulgó una nueva constitución por la que se creó el Estado Novo (Estado Nuevo). Portugal se convirtió en un Estado corporativo con una economía planificada, donde no había ninguna posibilidad de llevar a cabo gestos o actos de oposición política. En 1936, con el inicio de la Guerra Civil en España, Salazar apoyó a los insurrectos dirigidos por el general Francisco Franco...
Salazar gobernó desde 1926, adoptando el fascismo basado en el modelo de Mussolini y sacrificando la libertad individual. Este régimen duró hasta 1974.
Sostiene Pereira
A lo largo del libro Pereira, director de la sección cultura de un pequeño diario -el Lisboa- hace una evolución, una transformación que lo lleva de ser un periodista "apolítico, libre e independiente, que no quiere meterse en política" y al cual hasta el cura Antonio reprocha que no sabe en qué mundo vive, a empezar a percibir un Portugal donde "parece que todo el mundo está muerto o a punto de morirse". La preocupación constante de Pereira por la muerte es todo un símbolo del momento político social que vive Portugal en 1938.
Pereira manifiesta su cambio mientras reflexiona sobre la muerte, no sólo sobre la propia o la de su mujer, sino la que transita Portugal en tiempos del salazarismo, el régimen que dio su apoyo a Francisco Franco. Mientras Portugal quedaba en manos de la policía, dueña y señora de calles, vidas y voluntades. Portugal vivía el ahogo del estado de sitio, la pérdida de libertades y la persecución (prisión, castigo o muerte) de todo aquel que pensara diferente.
El tono del relato es el de alguien que da testimonio de lo que dice, de manera constante Pereira "sostiene" sus afirmaciones; contrapone una visión diferente -la propia, derivada de la libertad recobrada por él- frente a la "vedad" impuesta por el régimen salazarista.
Sostiene Pereira, por sobre todo, es un canto a la libertad, a la libertad de expresión, es también un homenaje a los que se animan y participan, dicen, se juegan. Pereira recorrió el camino que va desde el supuesto apoliticismo, el temor y la indiferencia, hasta llegar al periodista que se compromete y hace uso de su libertad.
Antonio Tabucchi nació en 1943, en Italia. El domingo 25 de marzo falleció en Lisboa, la ciudad en que transcurre la mayor parte del libro que recomiendo que lean y -o para que vean en su versión cinematográfica con Marcello Mastroiani en el papel de Pereira-.