martes, 22 de enero de 2013

Agua Sagrada

18 de enero.
"En los tiempos de la Santa Inquisición, los españoles que se bañaban eran sospechosos de herejía musulmana.
De Mahoma provenía la adoración del  agua.
Mahoma había nacido en el desierto, allá por el año 570, y en el desierto, reino de la sed, había fundado la religión de los perseguidores del agua.
Él decía lo que Dios, llamado Alá, le había mandado decir: en el camino de la salvación, había que rezar cinco veces al día, flexionando el cuerpo hasta que el mentón tocara el suelo, y antes de cada plegaria era preciso purificarse con agua.
-la limpieza es la mitad de la fe- decía".
de: Eduardo Galeano.



LA YAPA
En España la costumbre de bañarse no fue muy extendida, pues, en  la lucha contra el musulmán identificaba muchas veces los baños con las abluciones rituales prescritas por el Islam. Fue una de las tantas luchas de "unificación" de la reina Isabel...  increíble la mezcla religión-higiene!
Montaigne escribió: "Estimo que es saludable bañarse, y creo que algunos defectos de nuestra salud se deben por haber perdido la costumbre, generalmente observada en el pasado, de lavarse el cuerpo todos los días."
Con la desaparición de la higiene aumentó el uso de perfumes, hasta el punto que las damas que no se bañan jamás, acostumbran ponerse esponjas perfumadas entre los muslos y en las axilas "para no oler como carneros".
La sarna fue corriente no sólo entre la gente del pueblo sino también entre la gente "principal". Así, el custodio de Juana la loca escribió desde Tordesillas que las hijas de la reina "mejoran de su sarna".
Pero no fue sólo España, también Francia la que siguió esta costumbre que ahorraba agua y jabón por una parte, mientras criaba piojos y mugres...
Los perfumistas españoles e italianos fueron los que más éxito tuvieron a comienzos de la edad moderna. En Italia y España -donde las mujeres se maquillaban más- fue Catalina de Médicis, italiana de nacimiento, la que introdujo en Francia, además del tenedor, una serie de perfumes y productos de belleza que hicieron furor en la alta sociedad francesa: como no se lavaban, hombres y mujeres debían recurrir a los perfumes, cuanto más fuertes mejor, para ocultar su mal olor corporal.
(para más datos, aconsejo la lectura de HISTORIA DE LA HISTORIA, primera parte. de Carlos Fisas)
otro más http://www.innatia.com/perfumes_orientales/articulos/higiene-perfumeria-historia.php