18 de febrero
"Cuando Miguel Ángel se enteró de la muerte de Francesco, que era su ayudante y mucho más, rompió a martillazos el mármol que estaba esculpiendo.
Poco después, escribió que esa muerte ha sido gracia de Dios, pero para mí ha sido grave daño e infinito dolor. La gracia está en el hecha de que Francesco, quien en vida me mantenía vivo, muriendo me ha enseñado a morir sin pena. Pero yo lo he tenido durante veintiséis años... Ahora no me queda otra cosa que una infinita miseria. La mayor parte de mí se ha ido con él.
Miguel Ángel yace en Florencia, en la iglesia de la Santa Croce.
Él y su insuperable Francesco solían sentarse en la escalinata de esa iglesia, para disfrutar los duelos que en la vasta plaza libraban, a patadas y pelotazos, los jugadoes de lo que ahora llamamos fútbol"
de Eduardo Galeano
LA YAPA
Miguel Ángel fue: pintos, escultor y arquitecto.
Michelangelo Buonarroti nació en Caprese, cerca de Arezzo, el 6 de marzo
del año 1475. Pertenecía a una familia de buen pasar económico. Su padre, Lodovico
di Leonardo di Bounarroto Simone era "podestá" de Florencia; se trasladó a la capital de Toscana a las pocas semanas
de nacer el pequeño. La madre, Francesca di Neri di Miniato del Sera,
confió la alimentación del pequeño a una nodriza, Cuando Miguel Ángel tenía seis años falleció su madre; en
esos momentos conoce al pintor Francesco Granicci, un mozo de 12 años
que le anima a pintar, vocación que no fue bien vista por Lodovico Buonarroto.
Miguel Ángel ingresa
con trece años en la "bottega", a estudiar las técnicas del fresco y dibujo. Luego realizó estudios de escultura en el Jardín de los Médici, bajo el
patronazgo de Lorenzo el Magnífico y la dirección artística del donatelliano Bertoldo di Giovanni. Cuando los Médici caen en desgracia hizo que huyera con la ayuda de Girola Savonarola. Primero fue a Venecia y después a Bolonia, pero entre 1495-1496 regresó a Florencia para trabajar para Pierfrancesco de Médici, también simpatizante del
gobierno popular dirigido por Savonarola al igual que Miguel Ángel. En
estos años juveniles manifiesta ya una profunda admiración hacia la
anatomía que le llevará a acudir casi todas las noches al depósito
municipal de cadáveres para practicar disecciones que le permitieran
conocer mejor la estructura interna del cuerpo humano. En sus obras
escultóricas de estos momentos - especialmente la Centauromaquia -
muestra gran dominio del movimiento y de la anatomía. Se trasladó a Roma por primera vez donde recibió el encargo de su famosa Pietá
del Vaticano, de regreso a Florencia realizó
el David. Es evidente su obsesión por el desnudo. En 1505 el papa Julio II lo hace regesar a Roma para encargarle una
tumba con cuarenta figuras, de lo que resultó la escultura de Moisé y los Esclavos y la pintura del techo de
la Capilla Sixtina que le llevó cuatro años, entre 1508 y 1512. Otro papa (León X) le encarga la decoración de la fachada de san Lorenzo en Florencia -
obra que quedará inconclusa - y realiza numerosas obras para el gobierno de la República de Florencia trasladándose a Pisa, Livorno y Ferrara. En 1534 Miguel Ángel se instaló
definitivamente en Roma, donde realizó el Juicio Final en la Capilla Sixtina, por encargo del papa Paulo III, quien le nombró
pintor, escultor y arquitecto del Vaticano. En el Juicio Final, Miguel
Ángel exhibirá su admiración hacia la anatomía que le llevará a desnudar
al propio Cristo. Pero la reacción moral no se hizo esperar y ya en vida del maestro se empezaron a tapar los cuerpos. Buonarroti falleció en Roma el 18 de febrero de 1564 a la edad de 89 años. Su
sobrino Leonardo llevará en secreto el cadáver del genio hasta Florencia
y luego fue enterrado en Santa Croce.