
Desde entonces, para consolar al sol, los pájaros le ofrecen conciertos al principio y al fin de cada día.
Pero los alados cantores no pueden competir con los rugidos y los chillidos de los motores que gobiernan las grandes ciudades. Ya poco o nada se escucha el canto de los pájaros. En vano se rompen el pecho queriendo hacerse oír, y el esfuerzo por sonar cada vez más alto arruina sus trinos.
Y ya las hembras no reconocen a sus machos. Ellos las llaman, virtuosos tenores, irresistibles barítonos, pero en el barullo urbano no se distingue quién es quién, y ellas terminan aceptando el abrigo de alas extrañas".
De Eduardo Galeano
LA YAPA
lo que hace el progreso... los pájaros se parecen cada vez más a los humanos...http://youtu.be/cy7p_RcLVtY